la resistencia

La resistencia hondureña

Cuando Mel Zelaya fungía como presidente constitucional, condujo al pueblo de Honduras por parajes nuevos, desconocidos, pero de gran atractivo para el pueblo-pueblo, porque Mel Zelaya le abrió los ojos y la mente que por tantos años no sabía que tenía derecho a esas cosas tan añoradas, tan agradables para la vida de cada uno, de los excluidos y que la oligarquía, excluyó al pueblo insensiblemente.  

Ahora este pueblo-pueblo excluido de toda esa actividad, quiere ser incluido en esa vida que la nación solo ha permitido a esos pocos, a los poderosos y los ricos; el pueblo-pueblo quiere gran porción de la vida económica, social y política del país. Eso estaba vedado para el 70% de la hondureñidad.

Ver porcentajes es engañoso. El 70% de la población es de 5,6 millones de los 8,0 millones que somos los hondureños, según las cifras oficiales de 2010. De esos 5,6 millones de seres humanos que viven en Honduras, están divididos en dos clases; Los pobres y los extremadamente pobres. Los pobres son aquellas personas que de todo lo que ganan, apenas les alcanza para comer; y los extremadamente con todo lo que ganan NO les alcanza ni para comer.

A esos seres humanos: mujeres, hombres, niñas y niños, son los que Mel Zelaya abrió sus ojos y sus mentes y por ello claman por sus derechos de ser incluidos en la vida nacional. Esa masa humana EXCLUIDA exige una asamblea nacional constituyente.  

En medio de esa capa social se encuentra una delgada capa de mujeres y hombres que luchan con los pobres contra esa dura e insensible clase social que se caracteriza como oligarquía. Esta clase social domina la economía, la riqueza social y las estructuras políticas de la nación. Por tal razón la resistencia popular lucha pacífica y cívicamente contra esa fuerza. 

La Resistencia está integrada por diferentes fuerzas sociales unidas por un aglutinante: El golpe de estado, desde el 28 de junio del 2009. Los golpistas se equivocaron con la respuesta que el pueblo da, los golpistas creyeron que después de varios días el pueblo-pueblo olvidaría el golpe y sus consecuencias, como lo hizo después de los golpes de estado pasados, pero no. El pueblo-pueblo conoció el panorama que Mel mostró y eso al pueblo-pueblo le gustó. Ahora lo quiere para él por medio de una asamblea nacional constituyente.

Por eso la Resistencia convertida en una enorme masa humana esparcida por toda honduras y cada dial crece más, la Resistencia presiona para que Mel vuelva y darle a Honduras la fuerza para convocar la Constituyente. Ese es nuestro propósito de mantener viva esta llama que es la esperanza de este pueblo.